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Perdida entre un mar de libros –
Soy una gran fan de los libros de buscar y encontrar cosas (o como dirían mis peques, los cuentos para jugar a quién encuentra, quién encuentra). Creo que todos los niños deberían tener en casa este tipo de libros porque son divertidos y ayudan mucho a trabajar la atención y la agudeza visual. Además, con un poco de imaginación puedes sacarle muchísimo partido.
En ¿Dónde está la llama? no encontraremos una, sino que habrá diez llamas diferentes a lo largo de las diferentes páginas. Estas diez llamas han decidido irse a recorrer el mundo y nos muestran muchos escenarios diferentes: el día de Muertos, una playa de Miami, una feria, un jardín de tulipanes, un palacio indio… Y así hasta diecisiete escenarios diferentes. Esto me ha sorprendido pues hay muchas más escenas de las que solemos encontrar en este tipo de libros. Además, incluye una última para examen pues tendremos que encontrar a las diez llamas de la historia dentro de la tierra de las llamas. Podemos aprovechar la historia como punto de partida para despertar el interés de los más pequeños por conocer diferentes culturas y ver qué ocurre en cada una de ellas.
Las ilustraciones son muy ricas y están llenas de detalles que no podrás parar de investigar. Me recuerda a los míticos libros de buscando a Wally pero con llamas. Además, es necesario prestar mucha atención pues algunas están bastante escondidas.
Algo interesante es que podemos graduar la dificultad y adaptarlo a la edad o capacidad de atención de los pequeños. Si lo vemos con niños muy pequeños, el juego puede ser encontrar una llama en cada página. Con niños un poco más mayores, buscar a ver cuántas logran ver. Y con niños ya más mayores (o bien cuando ya lo hayan visto varias veces) ir buscando ya llama a llama. Esto me parece ideal porque permite que el cuento les aporte nuevas experiencias cada vez que lo ojean.
Al final del todo podemos encontrarnos las soluciones (por si alguna llama se nos ha resistido demasiado o hay alguna duda sobre su identidad, aunque yo recomiendo no mirarlo y dejar la búsqueda para la próxima vez), así como una lista del observador donde aparecen otras cosas o personajes que podemos buscar. Esto es una idea interesante que puede servir como punto de partida. Yo prefiero inventar otras cosas para buscar o, mejor aún, cuando hay varios niños darles la oportunidad de que sean ellos quien describan los personajes que tienen que encontrar los demás (también puede hacerse con un adulto, pero entre varios niños es todo un espectáculo digno de observar y tomar notas).
En definitiva, ¿Dónde está la llama? es uno de esos libros/juegos ideal para que los niños disfruten durante horas y horas pues cada vez que lo observen pueden vivir una experiencia totalmente diferente gracias a la variedad de sus ilustraciones. Súper recomendado.